No seas cagón. Nunca va a ser el mejor momento. En serio. Deja de buscarlo. Deja de esperarlo. Deja de desearlo. Nunca va a ser el mejor momento para dar el primer paso. Nunca va a ser el mejor momento para renunciar al trabajo que odias. Nunca va a ser el mejor momento para cumplir el sueño de tu vida. Es que siempre vamos a encontrar un pero. No es cuestion de esperar que desaparezca. Solamente hay que obviarlo.
Hay cosas que, sencillamente, no hay que pensarlas tanto. Te quiero contar un secreto. A veces hay que decidir en base a lo que sentimos. A veces, tanto pensar nos adentra en un laberinto del que, probablemente, no encontremos la salida. Un laberinto que, como una voz interior que solo busca estorbar, nos envuelve en idas y vueltas que, de tanto desgastar, van a terminar posponiendo la decisión que por un segundo creimos correcta. Esa decisión que, finalmente, no quisimos tomar. ¿Nunca te pasó? Estar tan cerca de animarte a eso que siempre soñaste y posponerlo, sin razón alguna, sin motivo aparente.
No se. A veces siento que nos exigimos demasiado. A veces siento que le damos demasiado lugar al miedo y le asignamos una probabilidad mínima al coraje, casi confundiéndolo con un milagro. Enumeramos mentalmente las condiciones que se tienen que cumplir para que nos animemos a tomar una decisión trascendental. Esperamos que se cumplan, una tras otra, sabiendo en el fondo que, simplemente, no va a pasar. Pero nos conformamos. Nosotros quisimos. Pero no se pudo. Esa es nuestra excusa. Esa es nuestra justificación.
Los extremos esconden profundas carencias. En serio. No te aferres a una única forma de ver las cosas. Entende que, a veces, hay que saltar al vacío. Entende que, a veces, necesitamos de la incertidumbre. Entende que, a veces, no saber es la respuesta. No seas cagón. ¿Qué estas esperando? ¿Cuál es esa obsesión por apostar a lo seguro? ¿Quién te dijo que es la única manera de ser feliz? ¿No entendes que los sueños no usan cinturón de seguridad?
Una Vuelta por el Universo. Una serie de relatos espontaneos e impensados. No seas cagón